¿Seguridad Vial? Bien; pero, un peatón atropelló a un coche y no tienen cojones de ponerle el casco al gato ciclista, los Ayuntamientos están provocando miles de accidentes, los fabricantes hacen vehículos para matarse más y mejor, etc., etc.
En esta entrada del Blog trataré sobre la Seguridad Vial, un tema que me preocupa, me ocupa y que llevo aprendiendo desde hace mucho tiempo. Sin duda el número total de accidentes y muertos se han reducido en los últimos años. Los jóvenes de 15 a 24 años han dejado de ser los más afectados por los accidentes. Este éxito en la reducción de accidentes y muertos sin duda se debe casi exclusivamente a la persecución implacable del conductor infractor, con el aumento de los controles de alcoholemia, radares y la aplicación del Permiso por Puntos, lo que ha provocado, eso es lo que esperamos los más optimistas, un aumento en la concienciación y responsabilidad del conductor. También es cierto que en estos años han mejorado notablemente las vías, mejorando su estado y con la construcción de nuevas autopistas y autovías; pero para los que ponen el acento en la mejora de las vías para reducir la siniestralidad, les diré que yo no creo que la mejora de las vías disminuya la siniestralidad y el número de muertos, salvo la mejora puntual de los denominados puntos negros. Por experiencia personal he conocido y sufrido vías de las malas malísimas, que no permitían en la práctica superar unas velocidades medias entre 60 y 80 Km/h, donde los accidentes no causaban muertos y rara vez tenían consecuencias graves, sin duda por la reducida velocidad a la que permitían circular esas vías. Estas mismas vías, cuando se han mejorado con un nuevo trazado y nuevo pavimento, aumentando las velocidades medias, han comenzado a cobrarse muertos y víctimas con secuelas graves. La prueba de lo que digo son los últimos datos de la DGT, confirmando el significativo aumento de las víctimas mortales en autopistas y autovías, las mejores y más seguras, y por el contrario siguen reduciéndose en las carreteras convencionales. La Administración ha puesto en marcha casi todas las medidas para controlar al conductor, olvidando a los demás actores implicados en la seguridad vial, peatones, fabricantes de vehículos, Centros de Reconocimientos Psicofísicos, Centros y profesionales de Formación Vial y la propia Administración, en especial a los Ayuntamientos. A la Administración se le acaba el chollo de la persecución del conductor, ya hay quien cree que se está produciendo una relajación de los conductores ante las citadas medidas de control y sanción. Entre las pocas medidas que podría y debería aplicar sería un Curso Periódico de Reciclaje de los Conductores. Según un estudio, inútil e innecesario para saber la conclusión, desarrollado por FESVIAL se afirma, que los conductores españoles solo conocen el significado del 50% de las señales. Como he dicho, a la Administración se le acaba el chollo y ahora debería mirar y perseguir a los demás actores que intervienen en la Seguridad Vial; pero “con la iglesia, obispos, curillas, sacristanes y monaguillos hemos topao, amigo Sancho”. Los peatones parecen que son sagrados e intocables, muchos andan y cruzan las calzadas diciendo como Fraga ¡La calle es mía! Poco les importa que el Ayuntamiento les pinten “tres pasos de peatones” en un tramo de 40 metros, abusando del conductor y provocando que este pase olímpicamente de estos pasos de peatones. Poco importa que la mayoría de los atropellos sean culpa del peatón, jamás habrán oído o leído un titular que diga: Peatón o ciclista sancionado por no cumplir las normas o ¡Un peatón atropelló a un coche! o "Un ciclista atropelló a un coche" Y siguen muriendo ciclistas y no tienen cojones de ponerle el casco al gato ciclista. Los vehículos han mejorado con muchos dispositivos de seguridad y nadie dice que la eficacia de esos dispositivos (Cinturón, Airbag, etc.) se va reduciendo con el aumento de la velocidad, hasta llegar a ser inútiles. Hay que decir, que las famosas pruebas de seguridad en choque o atropello a las que se someten a los vehículos, con los famosos Dummies (muñecos que simulan personas humanas), para comprobar la eficacia de todos esos adelantos técnicos, se realizan a velocidades que no superan normalmente los 60 Km/h. De modo y manera que tenemos unos fantásticos vehículos, con muchos adelantos técnicos y dispositivos de seguridad (a 60 Km/h.), pero absurdamente súper potentes y súper rápidos, capaces hasta de, literalmente, volar. ¿Sabe usted para que sirve ese vehículo con mayor cilindrada y mayor potencia? Pues está clarísimo, para pagar muchísimo más dinero a los fabricantes, para consumir más combustible, para contaminar muchísimo más y para matarse más y mejor. Por dar solo un dato de la DGT, el 66% de los motoristas muertos conducían o viajaban en supermegamáquinas, motocicletas con un motor de más de 500 centímetros cúbicos. Los fabricantes y otros gilipollas, que en su mayoría comen en la mano de estos, solo quieren vender el burro muchísimo más caro, afirmando que un vehículo con suficiente potencia puede salvarte la vida o de un accidente en un momento de apuro, esto es una mentira lacrimógena, falsamente piadosa e intencionada; porque, aunque aceptáramos eso como verdad, es una verdad a medias que es la mayor de las mentiras, porque no es menos cierto, que por cada caso en que la potencia salva una vida, hay otros cientos de casos de muertos por exceso de potencia y en consecuencia exceso de velocidad, porque los conductores fuerzan sus vehículos rebasando sus límites de seguridad, arriesgando cada vez más y más, minimizando los riegos, en la creencia que pilotan El Coche Fantástico. Nadie puede afirmar que un conductor de un turismo o un motero, que se compran, en su argot, un Pepino de 150 o 200 caballos es para respetar los límites de velocidad y no solo van a rebasarlos a cada oportunidad, sino que frecuentemente rebasan sus propios límites como conductor y los límites mecánicos y de seguridad de sus vehículos. La velocidad es la principal causa de los accidentes y los muertos en carretera, y de la que se derivan o se agravan las demás causas y factores que provocan los accidentes. Una distracción al volante, cualquier choque, una salida de vía o un reventón de una rueda es muchísimo menos peligrosa a 60Km/h. que ha 160Km/h. Pero ni siquiera la UE propone limitar por construcción la velocidad y potencia de los vehículos. Digo yo, que además de por no molestar a los fabricantes, será porque a los Estados le sale muchísimo más barato un muerto que un herido grave y la pela es la pela y el negocio es otro intocable.
El fiscal de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, ha anunciado una ofensiva contra los Ayuntamientos, que no quitan puntos del permiso de los infractores, incumpliendo la ley y también actuara contra los Centros de Reconocimientos Médicos que expiden los Certificados de Aptitud Psicofísica, por no realizar las exploraciones médicas necesarias. Pues, su señoría el fiscal, también podría entretenerse en perseguir a los responsables de los Ayuntamientos y otras Administraciones que dejan sin señalizar cientos de miles de intersecciones y obstáculos, o que señalizan miles de intersecciones con una señal de ceda el paso, donde no hay ninguna visibilidad, en lugar de señalizarlas con un Stop, que es lo más correcto y seguro, o construyendo mini y micro glorietas, muy de moda, con dos o más carriles donde no hay espacio suficiente para adelantar o cambiar de carril con seguridad, o pintando pasos de peatones normales y elevados de varios colores y/o sin las medidas y señalización reglamentarias y de seguridad, etc., etc., etc., provocando miles de accidentes. ¿Qué...? ¿Crees que le faltará tajo donde entretenerse el señor fiscal? Sobre los Centros de Reconocimiento de Conductores, digo yo: ¿Quedará alguno libre de pecado?, ¿Los cerrará todos, su señoría el fiscal?
El Real Decreto 170/2010, en su artículo 4 y 6 obliga a los centros a tener y estar presentes para realizar el reconocimiento médico a un Médico de Medicina General, a un Psicólogo y a un Oftalmólogo o concertar con una clínica sus servicios; además de contar con el material necesario para realizar el citado reconocimiento y la comprobación de 24 parámetros de la salud del conductor, según indica el Anexo I ¿Alguien conoce a alguien al que le hubieran sometido a un reconocimiento en toda regla y con arreglo a la ley o algo remotamente parecido? Los Centros de Reconocimiento son privados y por tanto negocios sometidos a la competencia de otros, que para sobrevivir tienen que tener clientes y ganar dinero y si a alguno se le ocurriera realizar todas esas exploraciones médicas tendría que cobrar una fortuna por cada Certificado y no tendría clientes; además, en el mejor de los casos, a igualdad de precios el cliente elegiría y elige el centro que menos pruebas y trabas le ponga para obtener el certificado. Por tanto, ¡Que los cierren todos! Está claro que la sanidad no puede estar en manos de empresas privadas. Lo más fácil y seguro es que el Certificado de Aptitud lo expida el médico de cabecera de cada conductor o un médico expresamente designado para ese cometido, en los consultorios públicos de la sanidad pública, que son los que conocen a su paciente y/o pueden tener acceso a todo el historial clínico del conductor y no estarían sometidos al mercado y la competencia. Sobre, la enseñanza de los conductores, nada nuevo bajo el sol, los requisitos de siempre para acceder al Certificado de Profesor que expide la Dirección General de Tráfico, son solo tener el Certificado de la ESO o equivalente, el permiso de conducir B y superar unas pruebas tipo test y otras presenciales. De los Centros de Formación de Conductores (Autoescuelas), además del desaguisado y liberalización de la famosa Ley Ómnibus, podríamos decir lo mismo que sobre los Centros de Reconocimiento, que son centros privados de enseñanza sometidos a una brutal competencia, donde el Estado ni regula, ni obliga a recibir un número mínimo de clases necesarias para una buena formación y donde es el alumno el que pone sus condiciones, las mínimas clases o ninguna para aprobar el test de la prueba teórica y las pruebas prácticas; así que el centro o profesor que no trague, que cierre el chiringuito y/o se dedique a otra cosa.
. COMO DESARROLLAR INTELIGENCIA ESPIRITUAL
ResponderEliminarEN LA CONDUCCION DIARIA
Cada señalización luminosa es un acto de conciencia
Ejemplo:
Ceder el paso a un peatón.
Ceder el paso a un vehículo en su incorporación.
Poner un intermitente
Cada vez que cedes el paso a un peatón
o persona en la conducción estas haciendo un acto de conciencia.
Imagina los que te pierdes en cada trayecto del día.
Trabaja tu inteligencia para desarrollar conciencia.
Atentamente:
Joaquin Gorreta 55 años